Llega el momento de pensar el destino para las próximas vacaciones. Estás buscando un lugar cercano, de sol y playa, pero sin masificación turística. Pues bien, tenemos el lugar perfecto para ti: la Península de Troia, una de las costas más fabulosas de Portugal. Aproximadamente 13 kilómetros de playas de arena blanca y aguas azul turquesa, rodeadas por dunas de arena y bosques de pinos. En los últimos años Troia se ha vuelto un destino muy popular, pero aún así podrás disfrutar de la paz y la tranquilidad en sus playas. En Likibu puedes encontrar una gran selección de alquileres vacacionales en Troia, para todos los viajeros y presupuestos.
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¿Cómo llegar a Troia?
La forma más sencilla y rápida de llegar hasta la Península de Troia es desde Setúbal. Hay servicio de ferry para vehículos. Si viajas sin coche, puedes optar por el catamarán, que sale de Sétubal y termina muy cerca del puerto deportivo de Troia. También puedes llegar desde Lisboa por carretera en coche, aunque hay que dar un gran rodeo; la distancia es de 137 kilómetros, y el tiempo aproximado del trayecto de 1 hora y 30 minutos.
¿Qué ver y qué hacer en Troia?
Si apuestas por alquilar una casa vacacional en Troia es porque deseas descubrir todos sus atractivos. Pues bien, aunque la razón principal de elegir este destino es disfrutar de sus maravillosas playas, esta región portuguesa ofrece otras muchas cosas.
Las playas de Troia son estupendas para familias con niños ya que, a diferencia de otras de la costa de Portugal, las aguas son muy calmadas. Por lo tanto, ofrecen una gran seguridad para los más pequeños. Te gustará saber que muchos turistas llegan hasta Troia a pasar un día, y la gran mayoría de ellos se concentran en el extremo nordeste ya que es el más próximo al ferri. Si buscas tranquilidad, te recomendamos ir a la Praia do Bico das Lulas, en el extremo sur.
Si te gusta la historia, en esta zona de Portugal se encuentran las ruinas romanas de Cetobriga. Hace varios siglos este lugar estaba dedicado al proceso de salazón de pescado. En el siglo V la población fue abandonada, y en los últimos años se han desenterrado muchos edificios: iglesia, termas, templos… Las ruinas están situadas a 7 kilómetros del centro, y una buena opción para llegar hasta ellas es recorrer el sendero en bicicleta.
Alquilar una casa de vacaciones en Troia se convertirá en una de las mejores decisiones de tu vida. Disfrutarás del mar, del sol y de la tranquilidad en un entorno tranquilo en compañía de quien tú quieras.
